MI HISTORIA

LA FOTOGRAFÍA Y YO

Siempre recuerdo aquella vez que mi padre me prestó su Minolta y disparé una réflex por primera vez. Tendría 7/8 años y desde ese momento quedé enamorado de la fotografía. Encuadrar, componer, pero sobre todo me encantaba la incertidumbre de la espera del revelado... cuando llegaba papá con el sobre con las fotos que habían "superado" el corte del laboratorio; lo pienso y me entra una bonita nostalgia. El tiempo pasó, las cámaras fueron evolucionando, pero mi amor por la fotografía no cambió.

Mi estilo fue cambiando con mi historia. La cámara siempre en la mochila. Mis viajes fueron moldeando mis disparos. La fotografía como terapia y como crítica social. Sin ella hoy en día no entendería mi vida. Mi patrimonio es rico... tengo la cabeza llena de experiencias y mi archivo lleno de vivencias. 

Luego llegó la madurez, tanto a mí como a mi fotografía. Y aquí me encuentro, con mi estudio en Sevilla, con mis niños y niñas, mis embarazadas y mis bodas. Con mis tardes de editoriales y con mi constante pasión por los retratos. 

¿CÓMO ES MI FOTOGRAFÍA?

Con mis fotos busco mirar el alma de cada persona, buscar la esencia de cada una. Que te diviertas, te sientas cómod@, que compartas conmigo una experiencia fotográfica, disfrutando del momento. 

Para mí es tan importante la técnica como la psicología. Ambas son imprescindibles para obtener el mejor resultado, cuidando todos los detalles a lo largo del proceso. A pesar de que tengo una formación profesional que podría destacar, prefiero resaltar que día a día aprendo de lo que me rodea. De las familias que confían en mí, que me cuentan sus alegrías pero también sus problemas; de un bebé, de una niña que sólo quiere jugar, de un novia emocionada o un padrino nervioso. 

Si hay algo que puedo garantizarte es que hago mis reportajes con mucha dedicación y cariño, buscando que el resultado sea único y significativo para tí.   

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